sábado, 23 de febrero de 2008

Casualidad


Esta mañana ha venido a visitarme mi amiga casualidad...

Después de una llamada telefónica de anoche, cuyo eco me resonaba a días ya pasados de risas y llantos, esta mañana mi pasado inmediato me ha querido recordar que no estan tan lejos aquellas horas en que podía ser otra y a la vez yo, aquellas horas que han cambiado radicalmente mi vida.

Esta mañana, mientras pensaba en lo que pasó anoche (aunque realmente tampoco es que pasara nada) he recordado a esos amigos que ahora parecen tan lejanos en el tiempo o en la distancia pero que para mi lo siguen siendo. Gente que ha compartido tantas horas conmigo, tantas cosas, que no los puedo dejar de lado.

Es curioso como, mientras pensaba en eso, me ha llegado el sms...Son extrañas las casualidades,¿verdad? O quizá no sean tales...Un guiño del karma, una broma del destino, un toque de atencion de lo que quiera que sea que haya por ahí arriba (si es que lo hay)...

En fin aquí me quedo yo ahora, pensando en la casualidad.

miércoles, 6 de febrero de 2008

300 preguntas


Ayer me mandaron uno de esos mails de pregunas sobre tí, como si de un test de tu personalidad se tratase. El asunto es que se debe contestar de la manera más sincera posible y reenviárselo a tus contactos para que lo lean y te lo reenvien a ti, pero con sus respuestas. Con esto lo que supuestamente se pretende es conocerse mejor, que la gente sepa aspectos de ti que nunca antes les habias revelado y viceversa... He de confesar que lo lei y lo hice, con todas sus conscuencias (es decir, que lo reenvie) pero ahora me planteo la necesidad y la utilidad real de hacerlo.

¿Sera posible que hayamos llegado a tal punto en nuestro deterioro de las relaciones sociales que solo podamos conocer ciertos aspectos de nuestros amigos, conocidos o parejas a través de las preguntas de un ciber test creado, por algun adolesente cotilla y aburrido?¿Donde ha quedado esa conversacio informal (o seria) frente a un cafe o unas cañas?¿Será posible que prefiramos ser voyeuristas cinsentidos del mundo intimista de nuestros semejantes, una suerte de convidado de piedra, en lugar que parte activa de esa vida personal?

Lo más triste, aparte del patente deterioro de nuestra capacidad de interacción inmediata (ës decir, no mediada por ninguna clase de tecnología), es que ese afán de "mirones" viene alimentado desde hace décadas por la televisión en la cual, los programas del corazón y "reality shows" nos hace fagotizadores de vidas ajenas, vidas que vivimos de una forma pasiva, asimilándolas como experiencias reales pero que no lo son. Son re-creaciones de la vida, vidas inventadas para que parezcan reales que nosotros, avidos de sensaciones que nos sentimos incapaces de explorar por nosotros mismos, buscamos en la forma de espectadores ya sea delante de la caja tonta o a través de las 300 preguntas de un test.